En el mundo actual, las empresas tienen una fuerza de trabajo multigeneracional. Convergen en algunas ocasiones desde Baby Boomers, Generación X, Generación Y (Millennials) hasta Generación Z, cada uno de estos grupos tiene sus propios talentos y características, así como sus propias necesidades. Por esa misma situación es importante tomar en consideración que no existe una solución única de beneficios para colaboradores que satisfaga las necesidades de todas las generaciones en esta fuerza laboral diversa.
Los beneficios son una inversión que se debe examinar cuidadosamente para determinar cómo atraer a los colaboradores. Tener claridad de sus preferencias, nos permite ofrecer beneficios relevantes y colocar a la empresa en el centro de atención como un colaborador comprometido a satisfacer las necesidades de su talento. Los beneficios pueden aumentar la satisfacción y la productividad de los colaboradores, lo que conduce a una menor rotación de personal y un aumento de las ganancias.
Por ejemplo, para la Generación Z tiene una alta prioridad los temas de salud mental, además son altamente tecnológicos, por lo que podrían valorar altamente la atención médica en línea o basada en aplicaciones y especialmente consultas psicológicas.
La Generación X y los Millennials buscan beneficios de salud más integrales, donde se puedan incluir a dependientes y parientes que viven con ellos. Los baby boomers probablemente están cerca de su proceso de jubilación, por lo que sus necesidades se pueden centrar en la prevención. Por ejemplo, contar con jornadas de vacunación o incluir un plan de laboratorios preventivos o controles anuales que les ayuden a mitigar la aparición de problemas de salud.
Para las cuatro generaciones también se pueden considerar beneficios que no necesariamente estén relacionados con la salud. Por ejemplo, prestar atención a la gestión financiera, la orientación para la jubilación y los beneficios de desarrollo profesional. La personalización de los beneficios debe considerar los intereses de su población. Algunos ejemplos de beneficios que se han ido incorporando en algunas empresas son: membresías en gimnasios, sesiones de relajación, programas de pasatiempos como leer (clubes de lectura) o incluso orientación y apoyo a la hora de planear sus viajes, etc.
Cambiar el enfoque de beneficios para que se adapte a las necesidades de cada uno requiere tiempo y comunicación.Las empresas deben escuchar atentamente a sus colaboradores. Por ejemplo, pueden organizar reuniones trimestrales de preguntas y respuestas con los colaboradores para recordarles los beneficios disponibles y escuchar sus necesidades, así como solicitudes de mejoras a los beneficios actuales. Otra manera valiosa de recopilar información es a través de encuestas y pequeños grupos de discusión para averiguar qué beneficios buscan. Es importante recordar que las necesidades son cambiantes, y que las empresas que estén más atentas serán las que atraerán al mejor talento.
Los beneficios personalizados se centran en la persona. Cada colaborador es una persona con necesidades personales y profesionales y un deseo de satisfacerlas.